1300 gramos no parecen gran cosa. Apenas el peso de unas cuantas barras de pan. Pero ese escaso kilo y medio colocado entre nuestras orejas sostiene el peso de toda la evolución humana y uno de los mayores misterios de la ciencia moderna, un territorio que aún tiene mucho de inexplorado, y en el que sólo los más osados se atreven a avanzar.
Dos de esos exploradores son Paulo Rodrigues y Vesna Prchkovska. Él ingeniero informático. Ella ingeniera electrónica. Él portugués, ella Macedonia. Ambos se conocieron en Holanda durante su doctorado en Biomedicina y ambos eligieron España para aventurarse a descifrar un poco más esos 1300 gramos de misterio. “Aquí se hace muy buena investigación, hay centros de excelencia en neurociencia e investigación clínica, pasión y voluntad por apoyar las ‘start-up’ y una gran calidad de vida: el sol, la playa, la comida, la gente, tiene un ventaja muy grande en la captación de talento para los equipos.”, me explica Paulo. Desde 2013 ellos cuentan con el apoyo de Wayra, la aceleradora de start ups de Telefónica. ¿Su proyecto? Mint Labs, un software que permite transformar resonancias magnéticas en mapas personalizados de fibras y conexiones neuronales en 3D y a todo color.